VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES, NIÑAS Y ADOLESCENTES.
La violencia (física, psicológica y emocional principalmente) contra la
mujer, las adolescentes y niñas es muy frecuente en la ciudad de Bogotá,
evidencia de esta problemática son las siguientes noticias más destacadas en la
semana del 13 al 17 de febrero del
presente año:
“Mujeres, inseguras en el espacio público.” El Espectador
“Rescatan 33 menores en
zona de prostitución del centro” El Tiempo
“Los tocamientos y
manoseos no consentidos, son violencia sexual” Secretaria Distrital de la Mujer
En la noticia publicada el 13 de febrero de 2017 en
el periódico El Espectador, se manifiesta la problemática de inseguridad en Bogotá
enfocada a las mujeres y niñas, la falta de apoyo por parte de la policía
metropolitana, la poca concurrencia de gente entre las 6:00 y 11:00 pm y las
zonas que se han dejado de frecuentar por las mujeres debido al riesgo que
presentan estigmatizándolas como zonas “solo para hombres” son los aspectos en
los que las mujeres se encuentran de acuerdo respecto al tema central de la
seguridad en la ciudad. Se hizo un análisis estadístico por localidades en la
ciudad de Bogotá en cuanto a los aspectos mencionados anteriormente, los
resultados exponen a las localidades de Antonio Nariño, Puente Aranda y Barrios
Unidos con el 51% de calles desiertas; Ciudad Bolívar, Bosa y Kennedy con el
84% en carencia de vigilancia y Barrios Unidos y Santa Fe con el 94% en
presencia únicamente masculina. Aunque no todo es negativo, la iluminación y la
frecuencia del transporte público son aspectos favorables y destacados en la
lucha contra la inseguridad y perturbación de la tranquilidad de las mujeres en
la ciudad, el distrito se dispone a mejorar los sistemas de cámaras y
vigilancia.
Así mismo los días 11 y
12 de febrero del año en curso, la policía metropolitana de Bogotá rescataron a
33 menores de edad, los cuales estaban siendo explotados sexualmente, exactamente
en el barrio Santa fe se presentan jóvenes para obtener un trabajo digno, y
posteriormente son secuestradas para ser prostituidos; al ser enterados días
antes, las distintas entidades a cargo como lo son la secretaria de seguridad,
la administración local, la policía y el distrito, para poder recuperar
territorios marginados, en los que no se ejerce ningún tipo de control y para
que en muchos casos no se violen los derechos de los ciudadanos, así mismo se
está realizando un plan para la verificación de las zonas en las cuales se
ejerzan la prostitución y le venta de licores, para poder evitar esta gran
problemática que azota a la capital de Colombia.
Tomando el tema de la violencia
contra la mujer, “La Secretaría Distrital de la Mujer rechaza los
recientes hechos de violencia sexual, manifiestos en tocamientos y manoseos no
consentidos y abuso sexual contra mujeres y niñas que se han cometido en
diferentes espacios de Bogotá, durante los últimos días”.(Secretaría Distrital
de la Mujer, 2017) incluyendo sin excepción
la etapa de la infancia hasta la vejez, sin importar su etnia, raza, estrato
social, tipo de trabajo, orientación sexual, condición de discapacidad u origen
rural. El delito de abuso sexual a las mujeres también incluye hechos donde no
necesariamente hay contacto físico.
La violencia contra la mujer en todos sus aspectos es
un fenómeno que se sigue presentando consecutivamente a pesar de los esfuerzos
estatales y gubernamentales por reducirlo, la investigación y las estadísticas
demuestran que específicamente la ciudad de Bogotá es un lugar muy inseguro
para el desarrollo personal y social de las mujeres y niñas. La vigilancia por
parte de entidades como la policía metropolitana y empresas de seguridad
privada es un factor que debe mejorarse y al que se le debe prestar atención
con el fin de apoyar y rehabilitar los lugares en los que se ha encontrado
algún riesgo para la integridad de las mujeres, así mismo acudir a la
concientización en la sociedad como una estrategia que inculque la tolerancia y
el respeto a los demás, específicamente a las mujeres, niñas y adolescentes, qué
como sabemos se ven más afectadas por la violencia de género y el maltrato.
Por otra parte la
violación de los derechos de los menores de edad fusionada con la prostitución
forzada es una problemática en la cual
todos los ciudadanos de Bogotá deben aportar para solucionar, estos hechos son
principalmente causados por el entorno familiar y económico; así mismo se debe
tomar en cuenta no solo los derechos de las personas que son obligados a realizar
este trabajo, sino también las que realizan esta ocupación por necesidad, esa
discriminación presentada por el
“estigma asociado a su modo de trabajo; estas condiciones socio económicas
impiden su acceso a derechos básicos además de sistemas de protección
adicionales” (World Health Organization [WHO], 2005) para las trabajadoras
sexuales, tomando en cuenta el observatorio que realiza la ONG llamada “Parces”
sobre principalmente los derechos que deben tener las mujeres en estos casos,
en Colombia esta labor es legal pero así mismo no se les garantiza ninguna
asistencia por parte del estado o alguna entidad ya que el incremento de
los “grupos sociales vulnerables como
migrantes, jóvenes y/o transgeneristas, minorías étnicas y/o raciales” en
Bogotá es evidente ya que muchas de las jóvenes que ejercen la prostitución llegan principalmente de zonas rurales por causa del
conflicto armado y las distintas condiciones de pobreza en muchas de las
regiones de nuestro país.
Retomando el tema de
los 33 menores que fueron forzadas a la prostitución es impresionante
únicamente que hayan realizado dos
denuncias por desaparición, mostrando otro lado de esta problemática que se
vive, en muchas de las familias bogotanas actuales ya no existen el interés y
la responsabilidad debida para los hijos, hasta el punto de que en muchos de
los casos la gran mayoría de trabajadores sexuales son de menores de edad
(entre los 15 hasta los 25 años), pero esta responsabilidad esta compartida, ya
que el Estado tiene una falta de control en las distintas zonas de tolerancia que se
encuentran en Bogotá, y muchas de las autoridades responsables no toman cartas
sobre el asunto.
La violencia física es una
evidencia de la cultura machista donde el hombre tiene un comportamiento
inadecuado y donde tampoco se respeta los derechos que existen de las mujeres. “Estas creencias se usan como justificantes
de la violencia al culpar a la mujer por su forma de vestir, lugar donde se
encuentra, manifestaciones de su sexualidad, hora en la que suceden los hechos
o cualquier comportamiento que pueda aparecer como insinuación o aceptación de
situaciones sexuales.
En el año 2016, el INMLCF registra 3.518 reportes de mujeres víctimas de presunto delito sexual, frente a la población esta cifra representa una tasa de 85 casos por cada 100.000 mujeres. Tanto en 2015 como en 2016 las localidades con mayor número de reportes por presunto delito sexual son Kennedy y Bosa.”(Secretaria Distrital de la Mujer, 2017)
En el año 2016, el INMLCF registra 3.518 reportes de mujeres víctimas de presunto delito sexual, frente a la población esta cifra representa una tasa de 85 casos por cada 100.000 mujeres. Tanto en 2015 como en 2016 las localidades con mayor número de reportes por presunto delito sexual son Kennedy y Bosa.”(Secretaria Distrital de la Mujer, 2017)
Este tipo de violencia se puede
ejercer contra las mujeres de manera
amplia donde se incluye cualquier acción que condicione la libertad como las
amenazas, uso del poder y los sobornos. En muchos de los casos son causados por
los mismos familiares, incluso la misma pareja
también por personas de confianza o personas completamente extrañas, así mismo el Estado y los
distintos ejes encargados deben velar por la seguridad de tanto mujeres, niñas
y jóvenes a pesar de las campañas que incentivan el respeto, se siguen
presentando actos violentos en contra de ellas debido a que la sociedad
bogotana ha naturalizado el abuso, el maltrato y la intolerancia, haciendo de
estos aspectos algo normal y cotidiano. Para obtener una solución efectiva para
este tema se debe tomar conciencia del daño produjo en la sociedad, para que no
ocurra ninguna forma de violencia de genero ya sea contra la mujer en el
transporte público o con los jóvenes que fueron forzados a la prostitución, por
lo tanto se tiene la tarea de trabajar arduamente para poder restablecer la
seguridad en los distintos territorios que estuvieron marginados por mucho
tiempo, y que no se sigan cometiendo los distintos casos de vulneración de los
derechos humanos.
Referencias
Arciniegas, C. G. ( 2017). Mujeres, inseguras en el espacio
público. El Espectador.
El Tiempo.(2017). Rescatan
33 menores en zona de prostitución del centro. http://www.eltiempo.com/bogota/rescatan-menores-de-zona-de-prostitucion-del-centro-de-bogota/16818054
Parces ONG. (2013). Observatorio
de Trabajo Sexual. www.parces.org/proyectos/observatorio/
Secretaria Distrital de
la Mujer. (2017). Los tocamientos y
manoseos no consentidos, son violencia sexual.http://www.sdmujer.gov.co/inicio/1138-los-tocamientos-y-manoseos-no-consentidos-son-violencia-sexual
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